Detectar las cámaras espía es vital para no ser grabados. En las últimas semanas se han encontrado cámaras ocultas en los baños de la Universidad Politécnica de Valencia y del hospital Clínico.
Las cámaras en los baños suelen colocarse en las rejillas del aire acondicionado. Todas tienen una lente que las delatará tarde o temprano. Uno de los mejores consejos a la hora de cambiarse en un vestuario público es mirar a todos lados, pero sin obsesionarse, la probabilidad que te estén espiando es muy baja.
Los enchufes o interruptores, los marcos de las ventanas o puertas pueden ser lugares recurrentes donde colocar un dispositivo espía. Hay que tener en cuenta que hay cámaras muy pequeñas y flexibles que caben en cualquier espacio. Una forma de comprobar que no nos espían es poner en marcha un barrido electrónico, una tecnología muy cara que se encarga de certificar con equipos específicos que no hay productos de espionaje en el baño.