El empresario británico Don Bryden ha puesto en marcha una iniciativa de dar 4 días extra de vacaciones a los trabajadores no fumadores. Poco tardará en acogerse en otras empresas del mundo.
Así, dice, quiere compensar a los que no fuman ya que los que lo hacen pierden «unos diez minutos» por cada cigarro. «Miro a los otros durante ese tiempo y están siempre al teléfono, tecleando y haciendo su trabajo, así que pensé que debían ser recompensados»,cuenta.
Desde que anunciara esta medida, el hombre de negocios afirma que varios trabajadores han dejado de fumar o tienen intención, al menos, de dejarlo. Pero la recompensa, asegura Bryden, no será inmediata.
«No funciona así. Si consiguen dejar de fumar durante 12 meses, les daré esos cuatro días extra», concluye.
