La bacteria Helicobacter pylori está presente en más del 60% de la población en España. Es desconocida a pesar de ser la infección más frecuente del mundo, la mayoría de los infectados nunca llegan a enterarse. Puede desembocar en una gastritis, una úlcera péptica y un cáncer gástrico.

Solo del 10 al 15 % de las personas infectadas con Helicobacter pylori desarrollan síntomas. Suelen ser hinchazón de estómago, un dolor muy agudo, náuseas, pérdida de apetito, incluso sangre en el vómito o las heces.

Para recuperarse puedes tardar dos o tres semanas, recetan antibióticos, hay un fármaco que disminuye la producción de ácido por parte del estómago. Una vez eliminada la infección por la bacteria, las probabilidades de reinfección están por debajo del 3%.

Cuando se presentan estos síntomas, puede diagnosticarse con una sencilla prueba de aliento. También mediante un análisis de sangre puede detectarse la bacteria o mediante prueba de heces o biopsia.