El Gobierno en funciones presidido por el líder socialista, Pedro Sánchez, ha aprobado la duplicación de los fondos públicos que se destinan a la adquisición de suministros para las aeronaves destinadas a uso exclusivo del Ejecutivo y la Casa Real: cinco aviones Falcon y dos Airbus A310.

En concreto el gasto aumentará un 100% duplicando su presupuesto y pasar de los 20.000 euros de coste anual a los 40.000 euros que se pagarán desde el próximo 2020. Así lo señala el nuevo contrato de “suministro de productos misceláneos” del Ejército del Aire donde están incluidos los citados aviones, un contrato que podrá ser prorrogable durante cuatro años por lo que la cifra global de gasto ascenderá a 200.000 euros.

Entre los productos que deberán haber en estas aeronaves el documento es claro y la compañía que se haga responsable del suministro deberá proveer a estos aviones con calidades equiparables a marcas reconocidas como se ejemplifican en el mismo: Absolut Vodka, ginebra Seagrams o Bombay Sapphire, Brandy Carlos I, orujo de hierbas Ruavieja, ron extraviejo Brugal, whisky Cardhú o Johnnie Walker Black Labe y vinos de la talla de Ribera del Duero o rioja El Puntido, siempre “de reserva”.

Además no faltarán las cervezas Mahou o Voll Damm y los snacks como berberechos Dani, mejillones en escabeche Isabel, pulpo gallego Pescamar, anchoas El Consorcio, patatas Matutano, caramelos Solano o cacahuetes Eagle.

Pero esto no será lo único de lo que disfrutarán los pasajeros VIP, todos ellos podrán consumir tónicas tipo Schweppes, refrescos energéticos Red Bull, zumos Don Simón, cafés Brasilia o Nescafé o licores de diferentes sabores.