Centro
Fachada del Palacio de Valeriola en Valencia.

La Fundación Hortensia Herrero i l’estudi ERRA arquitectura han donat a conèixer esta setmana els detalls del qual serà el futur Centre d’Art Hortensia Herrero, situat en el Palau Valeriola, al carrer del Mar, que veurà la llum a la fi de 2022 o principis de 2023 si es compleixen els terminis i tràmits.

Encara que encara queda molt per revelar, els promotors d’aquest Centre d’Art van explicar que el projecte constarà de 4 nivells, en els quals es distribuiran les diferents sales d’exposicions artístiques. A més, el projecte comptarà amb un pati enjardinat i un soterrani on podrà visitar-se les restes del Circ Romà.

“El conjunt arquitectònic està sent ja sotmès a un procés de rehabilitació integral amb l’objectiu de salvar i assegurar la seua estructura, recuperar el seu valor patrimonial, i adaptar-lo per a la realització de les diverses activitats que s’estan començant a planificar”, va indicar Alejandra Silvestre, representant de la Fundació Hortensia Herrero.

“El centre acollirà tant la col·lecció privada d’art de la mateixa Hortensia Herrero com a exposicions temporals d’artistes de reconegut prestigi nacional i internacional. El contingut concret el revelarem en el seu moment, però estem treballant per a portar a artistes del màxim nivell i volem que algunes de les seues creacions s’integren arquitectònicament en el conjunt”, va explicar Javier Molins, director artístic del Centre d’Art Hortensia Herrero.

Maqueta del futur Centre Hortensia Herrero.

Los trabajos de rehabilitación y adaptación correrán a cargo del estudio ERRE arquitectura, liderado por Amparo Roig y José Martí. En representación del estudio valenciano se dirigió a los vecinos Alejandra de Juan. La arquitecta manifestó que “El Palacio Valeriola está suponiendo para todo el equipo un reto profesional apasionante, desde las primeras fases de investigación histórica en colaboración con profesionales de diferentes disciplinas, hasta los trabajos de rehabilitación, adaptación y transformación de un inmueble que nos encontramos en un avanzado estado de deterioro”, y añadió que “estamos trabajando con la firme intención de convertir el futuro Centro de Arte Hortensia Herrero en un nuevo polo de actividad que consiga dinamizar, potenciar y transformar la agenda cultural de la ciudad de Valencia”.

El Palacio Valeriola es un edificio de estilo neoclásico ubicado en la calle del Mar de una enorme importancia histórica y que, sin esta intervención, habría terminado por desaparecer debido al avanzado estado de ruina en el que se encontraba. Su construcción, que comenzó sobre los restos de la antigua judería y de restos de edificaciones de época musulmana, debió de ser un largo proceso de sucesivas ampliaciones y remodelaciones que culminaría a principios del siglo XVIII. La intervención integral en el edificio prevé dotar al espacio de arte de una superficie construida de unos 3.500 metros cuadrados aproximadamente para poder desarrollar sus actividades.

Hortensia Herrero, impulsora de este proyecto, desarrolla desde hace años su labor de mecenazgo a través de la fundación que lleva su nombre. El Centro de Arte Hortensia Herrero responde a dos de los objetivos de la entidad. Por un lado, el de Recuperar la sensibilidad histórica y artística, en este caso concreto en la ciudad de València, llevando a cabo la restauración de un edificio de una importancia histórica innegable. Por otro lado, el de Compartir la sensibilidad con la sociedad, acercando a los valencianos y a los futuros turistas que visiten el Centro de Arte las obras de algunos de los mayores artistas históricos y contemporáneos.

Maqueta del futur Centre Hortensia Herrero.

Con esta nueva infraestructura, València contaría con un nuevo espacio dedicado al arte contemporáneo y se sumaría así a la tendencia de otras ciudades europeas, que cuentan tanto con museos públicos como con fundaciones privadas sustentadas por muy diversos mecenas.

Ahora mismo, la Fundación Hortensia Herrero se encuentra inmersa en dos importantes intervenciones. Por un lado, este Centro de Arte y, por otro, la restauración de la Iglesia de los Santos Juanes. Estas iniciativas toman el relevo la Iglesia de San Nicolás, el Colegio del Arte Mayor de la Seda o la imagen de la Virgen de los Desamparados y el Camarín de la Basílica, entre otros.