Los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Valencia han empezado a recoger los restos quemados de alrededor de las dos torres calcinadas. Muchos trozos del material que recubría la fachada rodea las calles adyacentes. Esta trabajo se realiza después de que haya dado el visto bueno los investigadores y la policía científica.
Tanto los propietarios como inquilinos se han reunido para asociarse y poder defender sus derechos ante la incertidumbre de la situación. Un edificio municipal del barrio de Safranar empezara a acoger a los vecinos más vulnerables que acaban de perder su casa. Tendrán preferencia los que tengan niños, según ha trascendido.