El misterio estaba servido, una experiencia sin ubicación y sin rumbo fijado. Cervezas Alhambra volvía a sorprender con sus célebres “Noches Cervezas Alhambra”. La marca granadina, de la mano de la chef Rakel Cernicharo (Restaurante Karak), compartió con un reducido grupo de invitados su exquisita propuesta de alta gastronomía diseñada con el objetivo de descubrir, sin prisas, los orígenes renovados de Cervezas Alhambra mediante el arte de la degustación.

El encuentro tuvo lugar en un escenario único lleno de sorpresas, en la casa de la familia Moroder, situada en Moncada, un lugar insólito y clandestino que abrió sus puertas exclusivamente para Noches Cervezas Alhambra.

La velada comenzó con un aperitivo de bienvenida con Alhambra Especial en la terraza cubierta de la casa, donde los asistentes pudieron admirar como los artesanos de Mitumi realizaban joyas de diseño atemporales, de estética minimalista. Un ambiente único sin duda creado por la fusión perfecta del arte, la alta gastronomía y las cervezas granadinas.

Tras el aperitivo, los invitados accedieron al salón principal, en el que una gran mesa imperial esperaba a los comensales a ritmo de jazz en directo para degustar la creaciones culinarias de la chef inspiradas en los aromas, matices y peculiaridades de las tres referencias principales de la familia Cervezas Alhambra. Una cena de lujo llena de sorpresas, en la que la gastronomía, artesanía y Cervezas Alhambra fueron de la mano, y que giró en torno a ingredientes típicos valencianos.

En el menú diseñado especialmente para esta “Noche Cervezas Alhambra”, Cenicharo, ganadora del último Top Chef, ha querido rendir un homenaje a los productos locales estrella, elaborando de esta manera un exclusivo menú de alta cocina. Todo ello complementando a tres de las referencias de Cervezas Alhambra que ejercieron como hilo conductor de la velada.

“Noches Cervezas Alhambra”, experiencias que van más allá de la gastronomía puesto que son una serie de encuentros gastronómicos que la marca de cervezas granadina celebra a lo largo del año por toda la geografía española para transmitir su filosofía de vida, convirtiéndose en una cita obligada para los amantes de la artesanía contemporánea y la cerveza de calidad.